viernes, 23 de mayo de 2014

ARCANO O - El Loco -








ARCANO - 0 – El Loco

El O representa la expresión  del máximo potencial creativo en la forma, y al mismo tiempo, el despliegue de dimensiones cada vez más expansivas (0 a la derecha) y la expresión de la máxima inexistencia en la forma (0 a la izquierda).

El nombre que la figura de este arcano tiene en castellano – El Loco -, da cuenta de esta paradoja. El loco es aquel que no encuentra su lugar en el mundo, que está fuera de todo sistema organizado, el exiliado o excluido; pero, la raíz de la palabra “loco” remite a lugar, a ubicación (localización). Así, la palabra sugiere tanto “no lugar” como “lugar”; o sea, tanto aquello que no encuentra ubicación fija o permanente como aquello que nunca deja de estar en su lugar.

Siguiendo la paradoja de este arcano, el loco es el número 0 pero tambien es el 22, esto es, el último arcano. El Loco es el comienzo y también el final. Es aquello de lo cual surge el principio y aquello a lo cual arriba todo desenlace. Es todo y nada. 

El Loco del tarot nos proporciona un profundo contacto con la cualidad acuariana de la astrología y, sobre todo, con la recientemente descubierta (apenas algo más de 200 años) función de Urano. Sabemos que Urano representa la singularidad creativa que toda forma particular es potencialmente capaz de expresar, la libertad para diferenciarse de toda pertenencia o continuidad de modelo, la súbita alteración de patrones y la manifestación renovada del flujo energético vital de una nueva escala de circulación.

Una de las exigencias más importantes del Loco es que vivas tu vida. Esto quiere decir que tu conocimiento no procede de los libros, sino que lo adquieres a través de experiencias de todo tipo, tanto gratas como desagradables. Por consiguiente, el Loco es puramente impulsivo y no dictamina. Estar abierto a la vida es muy importante. Con la actitud del Loco no hay que esperar a que todo vaya como un reloj. Naturalmente, lo que suceda estará bien, pero lo que el poco critico Loco considera como “bueno” no es necesariamente nuestra idea de “bueno”.

El Loco es un buen personaje a quien consultar cuando todos nuestros planes se tuercen, dejándonos desvalidos a la deriva. En estas ocasiones, si escuchamos, podemos oírle decir mientras se encoje de hombros:

“Aquél que no tiene meta fija, no puede perder nunca su camino”.

Fuente  libro: Astrología y Tarot / Beatriz Leveratto/Alejandro Lodi.